Debido a una supuesta violación del reglamento mundial antidopaje, el extremo senegalés Keita Balde podría verse obligado a retirarse del Mundial de Qatar.
En abril, Balde tuvo que someterse a un control antidopaje mientras competía con el equipo italiano Cagliari en una derrota por 5-1 ante el Udinese.
El jugador, que actualmente milita en el Spartak de Moscú, dio negativo en el test, pero se descubrió que había infringido los procedimientos. En consecuencia, la Organización Nacional Antidopaje italiana le ha suspendido hasta el 5 de diciembre, que cae en plena competición invernal (NADO).
Según un comunicado publicado en la página web del Spartak, Balde fue descalificado por violar el protocolo de control antidopaje.
«Sin embargo, de acuerdo con el código disciplinario, cualquier sanción relacionada con el dopaje aplicada por otra asociación deportiva nacional o internacional, la organización nacional antidopaje, es automáticamente aceptada por la FIFA y debe ser reconocida por todas las confederaciones y asociaciones.»
El Athletic entiende que la FIFA está esperando el material traducido al inglés de Italia antes de certificar los procedimientos y la conclusión del NANDO, aunque el castigo es automático y tiene efecto inmediato.
Balde tiene la opción de apelar al tribunal suizo, mientras que la FIFA tiene la facultad de intervenir y remitir el asunto al Tribunal de Arbitraje Deportivo.
La Federación Senegalesa de Fútbol (FSF) dijo en un comunicado que estaba «siguiendo de cerca la evolución de la situación», pero anticipó que la suspensión de Balde duraría hasta el 22 de diciembre, es decir, cuatro días después del partido del campeonato mundial.
El 21 de noviembre, Senegal se enfrentará a Holanda para abrir su campaña en el Mundial. Otros rivales de Senegal en el Grupo A son Qatar y Ecuador.
El 3 de diciembre comienza la fase eliminatoria, y los cuartos de final empiezan cuatro días después de que termine la suspensión programada de Balde.
Desde que debutó con Senegal en 2016, Balde ha acumulado 40 partidos.